Visitamos el faro de Cudillero, que está situado en el concejo del que hereda su nombre, el de Cudillero, y que visitamos en el reto de los concejos asturianos.
Este faro sin duda ofrece una luz discreta al puerto más pintoresco del litoral asturiano.

Indice
Un faro entre acantilados, leyendas y casitas de colores
En lo alto de una ladera abrupta, vigilando en silencio uno de los pueblos marineros más bellos de España, se encuentra el Faro de Cudillero. Aunque no sea el más grande ni el más antiguo, su ubicación privilegiada y su conexión con el carácter marinero del lugar lo convierten en una joya del litoral asturiano.
Este faro no solo alumbra el mar: también ilumina el alma de un pueblo que vive de frente al Cantábrico, con orgullo y tradición.
Un faro con vistas infinitas
Puesto en funcionamiento en 1858, el Faro de Cudillero está construido sobre la Punta Roballera, un saliente rocoso que ofrece una de las mejores vistas panorámicas de la costa occidental asturiana. Su torre blanca, integrada en una vivienda de una planta, se alza con humildad pero con presencia, marcando el camino a los navegantes que entran al puerto.
Desde su mirador se pueden contemplar atardeceres de postal, ver pasar barcos de pesca, o simplemente escuchar el rugido del mar chocando contra los acantilados.
Una visita que combina mar, cultura y sabor
Llegar al Faro de Cudillero es tan sencillo como encantador. Puedes subir a pie desde el anfiteatro del puerto —esa espectacular colección de casas de colores que ascienden en forma de graderío— siguiendo senderos señalizados con aroma a salitre. En el camino, descubrirás miradores, escaleras imposibles y rincones secretos donde el tiempo parece detenerse.
Y al bajar, nada mejor que disfrutar de la gastronomía local: pescados frescos, mariscos y la inconfundible sidra asturiana, todo con vistas al mar.
Cudillero: más que un pueblo, una experiencia
Visitar el Faro de Cudillero es sumergirse en un viaje sensorial: la vista de los acantilados, el sonido del mar, el sabor de la cocina tradicional y el aroma de la historia marinera. Es un lugar perfecto para quienes buscan belleza natural, autenticidad y rincones que no aparecen en las guías masivas.
Ideal para una escapada romántica, una jornada fotográfica o simplemente para perderse entre callejuelas y miradores.
Cómo llegar
Para visitar este faro tendrás que inevitablemente rodar en moto hasta el pueblo de su mismo nombre, una visita imprescindible si estas de ruta por Asturias.
Puedes desplazarte por la autovía del Cantábrico, aunque lo más recomendable es hacerlo por la carretera Nacional N-632 y desde ella adentrarte en el bonito y colorido pueblo pesquero. Puedes hacerlo por dos carreteras (la CU-2 o la CU-3), cualquiera de ellas te ofrecerá bonitas vistas en la bajada o subida al núcleo rural que alberga el faro.
🌅 Faro de Cudillero: un faro pequeño con una vista gigante y un pueblo que enamora a primera vista.
Puntos de interés cercanos:

Mirador del Sablón
Situado en Oviñana (Cudillero), este mirador es uno de los tesoros mejor guardados del litoral asturiano. A pocos pasos de los acantilados de Cabo Vidío, se alza este pequeño paraíso que ofrece una de las vistas más impresionantes del Cantábrico. Y en su punto más mágico, un sencillo banco de madera invita a sentarse… y simplemente contemplar.

Faro de Vidío
Este faro es el último construido en Asturias y uno de los últimos de España, es por ello que cuenta con importantes innovaciones en materia tecnológica y de navegación. Se ubica en un recinto amurallado, con dos construcciones independientes al borde de unos impresionantes acantilados.
Este faro lo visitamos al realizar el reto de visitar TODOS los faros asturianos. En total estuvimos en 15 faros repartidos por todo el litoral asturiano, desde el más occidental (Tapia de Casariego) hasta el de San Emeterio, que es el más oriental de todos.
Un reto muy recomendable para conocer lugares impresionantes como el Cabo de Peñas y el Cabo Vidio.
En la izquierda tienes un vídeo de nuestro reto de los faros asturianos.
Conclusión
Los faros son mucho más que un simple punto en el mapa. Son un símbolo de la rica historia marítima y un lugar mágico para conectar con la naturaleza. No te pierdas la oportunidad de visitar estos lugares único y crear recuerdos inolvidables. Todos los faros están instalados en lugares impresionantes, pero los de la costa asturiana cuentan con un plus de belleza. En el caso del faro de Cudillero, su mirada al Cantábrico no te dejara indiferente.