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Descubriendo el Cementerio Musulmán de Barcia: Un Tesoro Cultural Olvidado
Descubre un rincón olvidado de la historia en el corazón del concejo asturiano de Valdés: el Cementerio Musulmán de Barcia. Sumérgete en la esencia de una cultura que dejó su huella en esta tierra. Exploraremos juntos la importancia de preservar este tesoro cultural para las generaciones venideras.
Historia del Cementerio Musulmán de Barcia
¿Sabias que en España hay dos cementerios musulmanes y que uno está en Asturias?
En el occidente asturiano, en el concejo de Valdés lucha por sobrevivir al abandono este campo santo musulmán, el mayor de los dos que se conservan (el otro está en A Coruña).
La presencia de tropas regulares musulmanas durante la Guerra Civil española hizo necesaria la construcción de cementerios según los preceptos islámicos.
La historia del cementerio musulmán de Barcia se remonta a 1936, cuando cientos de musulmanes llegados de Marruecos (de aquella protectorado español) vinieron a combatir junto al ejército nacional en su levantamiento contra la República en la batalla del Escamplero, cerca de Oviedo.
La mayoría de cadáveres (se cree que entre 300 o 400) de esos soldados que habían fallecido durante la batalla, fueron trasladados a este cementerio y sus restos fueron ignorados durante décadas.
Orígenes y Construcción
En Luarca estaba la base de operaciones del bando Nacional después de haber penetrado en el occidente de Asturias desde Galicia y haber ganado todo este territorio.
Es por eso que se cree que la localidad de Barcia fue la elegida para construir esta instalación. Ocupa una superficie total de 4.500 metros cuadrados. Destacan en la construcción las siguientes partes:
- Zona originaria de entrada.
- Garitas. Torres exteriores (2 de unos 5 metros de altura).
- Muro exterior perimetral, construido en piedra.
- Santuario para ritos fúnebres.
- Entrada. Arco en forma de herradura.
- Torretas. Pequeñas garitas ubicadas en las esquinas.
- Tumbas. Cubiertas por maleza.
Imagina los susurros del pasado mientras te adentras en este lugar sagrado. Construido en un tiempo de gran intercambio cultural, este cementerio es un testamento de la diversidad que enriquece nuestra historia.
Destaca la arquitectura del arco de entrada principal, construido en ladrillo visto en forma de herradura, y que sin duda es el elemento más representativo en la actualidad.
La infraestructura cuenta con dos elementos bien diferenciados, el cementerio, (de planta rectangular), y el recinto anexo (en forma de «L»)
Significado Cultural y Religioso
Cada piedra cuenta una historia, cada tumba encierra un legado. Este espacio refleja la profunda reverencia que la cultura musulmana otorga a sus difuntos. Descubre el simbolismo entrelazado en cada detalle arquitectónico y ritual.
Es espacio dedicado al enterramiento está protegido por un muro perimetral de mampostería de pizarra trabada con barro y carga, a modo de encalado, y completado con un tejadillo a doble vertiente.
En un recinto anexo formado por muros y torres, y un recinto interior con acceso al norte y que parece ser una puerta monumental que albergaba una gran losa (actualmente desaparecida) y podría tener la función de servir de recepción de los cuerpos antes de su enterramiento.
Estado Actual y Conservación del Cementerio Musulmán de Barcia
Descripción del Estado Actual
Aunque el tiempo ha dejado su marca, la esencia y la belleza de este lugar persisten. Es vital reconocer la importancia de conservar este patrimonio cultural para las generaciones futuras.
Esfuerzos de Conservación y Restauración
Nos enfrentamos a un desafío colectivo: proteger y restaurar este preciado legado. A través de la colaboración y el compromiso, podemos asegurar que este lugar perdure como un faro de nuestra historia compartida.
Lamentable estado de abandono el que se palpa tanto en el interior como en las inmediaciones del recinto de este lugar de enterramiento. La maleza es la única que habita y crece, mientras que los árboles van cayendo y derribando los muros de la infraestructura que parecen querer resistir el paso inexorable del tiempo.
Hubo un intento de recuperar este espacio y utilizarlo como reclamo turístico, pero la naturaleza parece avanzar sin descanso en su conquista por tapar lo que un día fue un campo santo.
Visitas y Experiencias
Experiencias de los Visitantes
Sumérgete en una experiencia única mientras caminas entre las lápidas centenarias. Cada visita es un encuentro con el pasado, una oportunidad para reflexionar sobre nuestra propia existencia y legado.
En la entrada podemos encontrar un panel informativo que nos detalla como era originalmente esta instalación.
Se conserva el perímetro, donde destacan varias garitas de unos tres metros de altura, y el arco de entrada.
También podemos ver una parte que fue construida con posterioridad y que podría haber sido una mezquita, aunque nunca se llegó a terminar.
Recomendaciones para los Visitantes del cementerio musulmán de Barcia
Te invitamos a ser parte de esta historia. Al visitar el Cementerio Musulmán de Barcia, muestra el respeto y la reverencia que merece este lugar sagrado.
Cómo llegar:
Es muy fácil llegar al Cementerio musulmán de Barcia, ya que está muy cerca de Luarca (villa natal del premio Novel Severo Ochoa) y además se extiende al lado de la carretera. Eso sí, no está señalizado cómo llegar, y la entrada tampoco esta adaptada para todo tipo de vehículos. Hay que destacar que tan solo hay sitio para estacionar uno o dos vehículos.
Desde Oviedo: Debes tomar la salida 467 (dirección N-634 Barcia/Almuña/Luarca). Una vez en la rotonda cogerás la primera salida (dirección N-634 Trevías/Tineo/La Espina).
Desde Galicia: Tienes que tomar la salida 460 (dirección N-634 Barcia/Almuña/Luarca). Importante tomar esta salida y no la anterior, porque si no tendrás que atravesar todo Luarca.
Es muy importante prestar atención, porque la entrada no está señalizada.
Conclusiones
La historia vive en cada piedra, en cada rincón de este cementerio musulmán. Sigamos adelante con la misión de preservar este tesoro cultural para las generaciones venideras. Nuestro compromiso es el legado que dejaremos atrás. Una pincelada de la historia, que como reza en un cartel informativo: «Quien no conoce su historia está condenado a repetir sus errores», Paul Preston.